Un nuevo escándalo sacude el deporte argentino. La diputada libertaria Juliana Santillán enfrenta una denuncia por abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, a raíz de un audio filtrado en el que supuestamente intenta facilitar la creación de Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) en el fútbol.

La denuncia fue presentada ante la Justicia por el legislador porteño Facundo Del Gaiso, quien asegura que Santillán actuó de manera ilegal al intentar convencer a un dirigente de un club para cambiar su personería jurídica y convertirlo en una SAD, a cambio de promesas de inversiones extranjeras. En el audio, Santillán menciona contar con el respaldo del ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona y el director de la Inspección General de Justicia, Roque Vítolo, lo que facilitaría la privatización del fútbol argentino.

La denuncia generó fuertes implicancias legales y políticas, pues, según Del Gaiso, Santillán debe rendir cuentas por abuso de autoridad. Este delito, estipulado en el Código Penal, involucra a funcionarios públicos que actúan en contra de las leyes, lo que se relaciona con el caso de la diputada.

El audio y la denuncia revelan el impulso del Gobierno de Javier Milei hacia las SAD, una estructura que Santillán considera esencial para el futuro del fútbol en Argentina. La diputada mantiene estrechos lazos con Guillermo Tofoni, empresario que promueve la implementación de las SAD en el país, lo que ha disparado acusaciones de tráfico de influencias.

La denuncia sigue su curso en el Juzgado Criminal y Correccional Federal 6, que investigará el caso tras la feria judicial. Este escándalo pone en el centro de la escena tanto a la política como a la justicia, ya que la figura de Santillán está directamente vinculada con los intentos de privatización del fútbol argentino.